El verano ha pasado y es la hora de volver a trabajar. Ya hemos hablado de las precauciones que teníamos que tomar antes de irnos para asegurarnos que la vuelta era lo más sencilla posible. Pero las cosas no siempre salen como las planeamos. Vamos a repasar las tres tareas de mantenimiento informático después del verano más importantes para estar seguros de que todo va bien.
1 – Comprueba la fecha de la última copia de seguridad.
Antes de irnos dejamos el sistema programado para que las copias de seguridad de los datos vitales se siguieran haciendo de manera automática.
De esta manera, si ocurría alguna catástrofe, tendríamos una copia de respaldo que nos permitiera volver a estar operativos en el mínimo tiempo posible.
Con suerte, hemos pasado un verano tranquilo y sin sobresaltos en la oficina, así que hemos podido descansar y prepararnos para el último trimestre.
Pero a veces no todos los problemas saltan a la vista, a veces un error pasa desapercibido y creemos que todo funciona bien. Ahora que hemos vuelto, hay que comprobar que nada se nos ha escapado.
Por eso tenemos que comprobar que las copias de seguridad se han estado realizando de la manera prevista, y una forma sencilla es comprobar las fechas y los tamaños de las copias de seguridad que se han realizado durante, por ejemplo la última semana.
Si todas las fechas y tamaños de copias son coherentes, todo funciona bien.
¿Qué hacer si observamos alguna anormalidad en las copias de seguridad?
Si -desafortunadamente- observamos algo extraño en el sistema de copias de respaldo, lo primero es configurar un nuevo sistema que empiece a hacer nuevas copias de seguridad, de manera que estemos seguros de que los datos están a salvo. Lo segundo es utilizar un ordenador para restaurar el sistema usando la copia de seguridad.
Si todo funciona bien, y los archivos y datos están disponibles sin ningún tipo de falla, habrá sido una falsa alarma.
Si algunos archivos no se abren o faltan datos, es que la copia de respaldo está corrupta y es inservible.
Por suerte lo hemos detectado cuando no nos era necesaria.
2 – Limpia todos los equipos que hayan estado “de veraneo”.
Como vimos en otro artículo, la humedad, la arena, el polvo, son enemigos acérrimos de la electrónica, y se acumulan progresivamente dentro de las placas y mecanismos de los equipos informáticos, provocando malfuncionamientos, calentamientos (por obstrucción de las vías de ventilación) y hasta cortocircuitos.
Después de haber expuesto los ordenadores a condiciones extremas, es conveniente que los abramos y procedamos a comprobar que todo el interior está en buen estado. Debemos revisar que no haya rastros de óxido, moho, humedad,… y si es necesario, aspirar para sacar todos los restos de pelusas, polvo, etc. que puedan haberse acumulado en el interior.
¿Qué hacer si encuentro restos de humedad, moho, etc. en el interior de un ordenador?
Si al acceder al interior de la maquinaria de un ordenador observamos restos de humedad, moho o incluso la batería hinchada, es importante que pongamos el ordenador en cuarentena inmediatamente.
Habrá que sacar las piezas afectadas (en el caso de la batería, reemplazarla) y comprobar que su funcionamiento es correcto y limpiarlas a fondo, además de intentar encontrar la razón por la que se ha producido esa acumulación anormal de humedad.
Un equipo con esos problemas puede dejar de funcionar en cualquier momento (normalmente en el peor momento) y afectar al desarrollo normal del negocio.
3 – Actualiza y optimiza los sistemas operativos y las aplicaciones.
Durante el verano es probable que, puesto que el sistema funcionaba bien, nadie haya querido ponerse a actualizar las cosas que hubiera pendiente, ya que la posibilidad de conflictos de software no resulta muy atractiva.
Cuando llega Septiembre el mantenimiento informático de la empresa requiere que todo el mundo tenga el sistema operativo actualizado, junto con el antivirus y las aplicaciones, de manera que no se dejen agujeros de seguridad.
Además es buena costumbre higienizar cookies, cachés y archivos temporales, que se puedan haber ido recolectando mientras nos conectábamos a diferentes redes o páginas web.
El ordenador es una herramienta de trabajo, y en la medida de lo posible, debe estar libre de actividad personal, que pueda implicar descargar archivos o visitar webs.
Conclusión
El mantenimiento informático para empresas es una tarea minuciosa y en ocasiones compleja, que requiere de conocimientos técnicos para hacer lo que sea necesario en cada caso y herramientas específicas que permitan abordar cualquier necesidad sin problemas.
Si usted no tiene el tiempo o los recursos para realizar el mantenimiento informático de sus equipos después del verano, no lo dude, contacte con Vic Micro donde tenemos profesionales cualificados con todos los medios necesarios para preparar un plan a su medida que le permita tener la confianza de que la informática no impedirá el buen funcionamiento de su negocio.
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